La Justicia francesa ha considerado "accidente laboral" sufrir un paro cardíaco mientras se practica sexo durante un viaje de negocios en contra de los argumentos de la empresa que defendía que la muerte se produjo después de las horas de trabajo y en una relación adúltera.
Los hechos re remontan a febrero de 2013, cuando Xavier acudió a un hotel de la localidad de Meug-sur-Loire, en el noroeste de Francia, junto con una mujer que había conocido recientemente, tras pasar la noche juntos el hombre murió de un ataque al corazón, según informa el diario británico The Times.
Xavier, ingeniero de la empresa de electrificación de infraestructuras ferroviarias TSO, estuvo con la mujer en otro hotel distinto al que la empresa reservó para él durante su viaje de negocios. Eso le valió a la empresas para argumentar que los hechos se produjeron tras sus horas de trabajo y que, además, no tenían relación con el desempeño del mismo ante Tribunal de Apelación de París para no hacerse responsable de la muerte.
El abogado de la compañía francesa argumentó también que el técnico había mantenido una relación adúltera. "Había interrumpido a sabiendas su viaje de negocios por una razón dictada por un interés personal, independiente de su empleo" cuando llevó a cabo una "relación adúltera con una completa desconocida".
Un argumento con el que intentaba desvincularse laboralmente de su muerte ya que ésta no era "atribuible a su trabajo sino achacable al acto sexual que mantuvo con una completa extraña".
El Tribunal de Apelación de París sentenció que la muerte del empleado era atribuible a un accidente en el lugar de trabajo porque se produce durante el desempeño del mismo. El trabajo en este contexto se refiere al tiempo de trabajo real en el lugar de trabajo habitual o cuando el empleado se encuentra en un viaje de negocios para su empleador, según se desprende del código de la seguridad social, artículo L411-1 de la ley francesa.
"En este caso en particular, el tiempo de trabajo dedicado al viaje de negocios cubre la noche que el empleador tiene que estar fuera de su casa", según ha explicado un portavoz del tribunal francés a Euronews.
"Durante todo el período del viaje de negocios, permanece bajo la autoridad del empleador hasta que demuestre que ha interrumpido una actividad que no puede considerarse parte de la vida cotidiana".
En este caso, los jueces señalan que tener relaciones sexuales puede considerarse "parte de la vida cotidiana".
El Tribunal de Apelación dictaminó que incluso si el accidente ocurrió fuera de la habitación reservada por la empresa TSO para el empleado, eso no lo puso fuera de la esfera de la autoridad del empleador.
La justicia francesa ha dictaminado que la familia de la víctima reciba por parte de la empresa el 80% del salario mensual del fallecido, hasta el día en que hubiera llegado su jubilación.
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