Rompió los esquemas de su época y hasta la actualidad es vista como un referente del feminismo combatiente en un mundo en el que los hombres, la monarquía y la Iglesia católica dirigían los destinos de todo lo que les rodeaba. Fue Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, mejor conocida como sor Juana Inés de la Cruz. La también llamada monja rebelde (12 de noviembre de 1651-17 de abril de 1695) llegó a las pantallas en 2017 retratada en una miniserie que está disponible en Netflix.

Denominada Juana Inés, esta producción original del canal Once de México y creada por Patricia Arriaga-Jordán, Emilio Maillé y Julián de Tavira. presenta a una Juana Inés en sus años de juventud. La serie, inspirada en la vida real de la escritora, persigue su relación con los entonces virreyes de la Nueva España, asentados en territorio mexicano.

Asimismo, en los siete capítulos de esta producción, de una sola temporada, se puede ver el duro camino que la pensadora tuvo que transitar en su búsqueda del crecimiento intelectual. “Sor Juana luchó en un mundo de hombres por su derecho y deseo al conocimiento y a escribir, es un personaje que nos puede nutrir mucho en este momento de nuestra vida social”, señala en una entrevista publicada en el sitio de eldiariodelamarina la actriz Arcelia Ramírez, quien dio vida a sor Juana. Arantza Ruiz fue Juana Inés de joven.

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Ya en el primer episodio se muestra cómo el ingenio de Juana Inés llama la atención de la virreina. Sor Juana Inés deberá someterse a un examen público para saber si se convertirá en la tutora de la hija de los virreyes.

Otros aspectos

Críticas por diversos frentes, especialmente de algunos seguidores de sor Juana Inés de la Cruz, aparecieron a raíz del lanzamiento de la serie. Acusaron a la producción de Juana Inés de haber sexualizado las relaciones de esta exponente del Siglo de Oro de la literatura en español con las dos virreinas, situación de la que la historia no guardó ningún dato que lo confirmara, recogen algunos medios extranjeros.

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“Vivimos en una sociedad en la que las mujeres son oprimidas, controladas, se padece el menosprecio y la marginación, están supeditadas al hogar, sin derecho a ejercer su libertad y sus proyectos”, agrega Ramírez en otra entrevista que dio a los medios sobre esta producción.

Sor Juana, influyente figura política en el México del siglo XVII, le dedicó cuatro poemas a la virreina Leonor Carreto, Marquesa de Mancera (1616-1673). En estos textos la llamaba “Laura” como la amada de Petrarca, se menciona en un artículo publicado en el portal www.dambiente.com.

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La misma nota señala que la amistad de la virreina con sor Juana Inés de la Cruz “fue primordial para ser aunque a las malas aceptada en la Ciudad de México de esos tiempos, como monja primero en el convento de las Carmelitas, de donde huye y luego en el de las Jerónimas, donde elige profesar su fe hasta que muere”. (E)