Mazapán, Duvalín y Pelón Pelo Rico: Guía a la diversidad de dulces mexicanos
Tiffany Acosta
Los dulces mexicanos tienen un inmenso significado cultural ya que reflejan la rica y diversa historia del país. Estos dulces están profundamente arraigados en las tradiciones mexicanas y se basan en ingredientes indígenas, como el tamarindo, el chile y el cacao, así como en influencias españolas como la caña de azúcar y las especias.
Son una parte integral de las celebraciones, festivales y la vida diaria en México, y gracias a la migración también en EEUU, y sirven no solo como dulces sino también como un medio para conectarse con el pasado y celebrar la herencia culinaria del país.
Los dulces mexicanos son conocidos por sus perfiles de sabor audaces y distintivos, que ofrecen una tentadora mezcla de elementos dulces, ácidos, picantes y salados que crean una experiencia de sabor emocionante y memorable.
Ya sean las delicias a base de tamarindo o los dulces de leche y cajeta, explorar estos deleites permite una apreciación más amplia de las tradiciones mexicanas, destacando la creatividad y la complejidad que los hacen imprescindibles para cualquiera que busque ampliar su paladar.
Si estás listo para ese viaje, aquí tienes una guía para principiantes sobre los diferentes tipos de dulces que México tiene para ofrecer.
A base de tamarindo
¿Qué son los dulces mexicanos sin tamarindo? Tamarindo es un sabor de dulce mexicano popular porque la fruta en sí tiene un sabor naturalmente y ligeramente ácido, lo que la convierte en una base ideal para crear dulces con perfiles de sabor complejos.
El dulce de tamarindo se puede preparar en varias formas, como pulpa, pasta o cobertura, lo que permite versatilidad en textura y sabor.
Pulparindo: Un dulce a base de tamarindo que es dulce, ácido y picante, a menudo cubierto con chile en polvo. Viene en diferentes sabores y niveles de especias.
Pelón Pelo Rico: Un dulce de pasta de tamarindo que se exprime de un tubo y se cubre con chile en polvo, creando un sabor dulce y picante.
Rellerindos: Un caramelo duro con forma y a base de tamarindo relleno con una pasta de tamarindo picante.
Cucharita: Este dulce es exactamente eso: una pequeña cuchara desechable rellena con pasta de tamarindo.
Banderillas: Las banderillas suelen ser un adorno para micheladas, tazas de frutas y otros refrigerios. Es una pajita amarilla cubierta con una pasta de tamarindo picante.
Tamalitos de Tamarindo: Los Tamalitos de tamarindo son dulces pequeños y masticables hechos con pasta de tamarindo y diseñado para representar un tamal pequeño.
Picante
Después de los dulces a base de tamarindo, los dulces picantes son probablemente los más populares entre las delicias mexicanas.
Estos dulces suelen incorporar ingredientes como chile en polvo, tamarindo y otros condimentos a base de chile para crear una experiencia de sabor única. Son conocidos por su mezcla de sabores dulces y picantes.
Pica Fresa: Gomitas con sabor a fresa conocidas por su combinación dulce y picante con una textura masticable y una capa de chile en polvo.
Rebanaditas: Paletas con sabor a sandía, generalmente en forma de rodajas de sandía, con un sabor ácido y picante cubiertas con chile en polvo.
Vero Mango: Una paleta con sabor a mango y una capa de chile.
Rockaleta: Una popular paleta mexicana que viene en varios sabores y capas, a menudo comienza dulce y gradualmente se vuelve más picante a medida que llega al centro.
Bolitochas: Caramelos duros y redondos que vienen en múltiples sabores como sandía, tamarindo y mango. El centro se rellena con chile en polvo.
Chamoy: Elaborado a partir de la mezcla de ciruelas o chabacanos con tamarindo y otros chiles, este dulce se consume más en su forma líquida, lo que permite usarlo como salsa. También viene en formas sólidas.
Lo tradicional
Los dulces regionales mexicanos tradicionales abarcan una amplia gama de delicias dulces que reflejan las diversas culturas, ingredientes y sabores que se encuentran en los distintos estados y regiones de México. Estos dulces a menudo se inspiran en las tradiciones indígenas y cada región de México muestra su herencia culinaria única a través de sus dulces tradicionales.
Obleas: Estas obleas echas con agua y harina se moldean de forma fina y redonda y normalmente se rellena con cajeta pero también se puede rellenar con chocolate o pastas con sabor a frutas. La cajeta es un caramelo tradicional mexicano elaborado con leche de cabra caramelizada y azucarada.
Glorias: Tipo de turrón elaborado a partir de una mezcla de leche, azúcar y frutos secos, normalmente pecanas.
Dulces Cristalizados: También conocidos como dulces cristalizados, son frutas, a menudo cítricas como naranjas, limones o limas, que se conservan remojándolas en un almíbar de azúcar hasta que se confitan.
Coco Banderitas: Este dulce está hecho de coco que a menudo tiene forma de pequeñas barras rectangulares que se asemejan a banderas mexicanas en miniatura. Estas barras generalmente se elaboran con coco rallado mezclado con azúcar o leche condensada para crear una mezcla dulce y masticable.
Jamoncillos: También conocidos como dulce de leche, se elaboran a partir de una mezcla de leche y azúcar, que se cocina hasta que espese y desarrolle un sabor caramelizado y una textura quebradiza.
Cocadas: También a base de coco, estos dulces se elaboran mezclando coco rallado con azúcar o leche condensada y luego cocinando la mezcla hasta que espese y forme una masa cohesiva. Las cocadas pueden variar en textura, desde suaves y masticables hasta firmes y ligeramente crujientes, según la receta.
Palanquetas: Barra de nueces o semillas que incluye maní, semillas de calabaza o semillas de sésamo que se unen con azúcar caramelizada o almíbar para crear una delicia compacta y crujiente.
Alegrías: Elaboradas con semillas de amaranto y miel, estas delicias ofrecen una textura crujiente y suelen combinarse con nueces, semillas o frutos secos.
Chocolate
El chocolate en México representa un amplio espectro de sabores y formas, atendiendo a un paladar diverso de entusiastas del chocolate.
Si bien el chocolate tradicional mexicano, a menudo caracterizado por el uso de cacao, azúcar y canela, continúa ocupando un lugar especial en los corazones de muchas personas, los dulces de chocolate comerciales ofrecen un toque moderno y accesible a este querido regalo. Encontrarás una gran variedad de barras de chocolate, bombones y bombones rellenos de licor.
Paleta Payaso: Esta paleta es un malvavisco entero bañado en chocolate con gomitas que forman ojos y una sonrisa en su capa de chocolate. Probablemente uno de los dulces más populares en México, es conocido por no parecerse a la cara de payaso en su empaque.
Carlos V: Una barra de chocolate con leche. Básica, pero bastante querida.
Kranky: Copos de cereales bañados en chocolate.
Bocadín: Barra de chocolate hecha con capas de obleas finas y crujientes y mantequilla de maní. Suele estar recubierto de chocolate y viene en varios tamaños.
Bubu Lubu: Una pequeña barra de chocolate que consta de capas de gelatina con sabor a malvavisco y fresa, recubierta de chocolate.
Lo dulce
Lo verdaderamente dulce de los dulces mexicanos, a diferencia de sus homólogos picantes, deleita el paladar con una sinfonía de sabores azucarados y afrutados. Estos dulces abarcan una amplia gama de texturas y formas, desde golosinas masticables parecidas a caramelos hasta dulces a base de maní que se desmoronan delicadamente en la boca.
Duvalín: Es un pequeño recipiente lleno de crema de sabores: chocolate, fresa o vainilla. A menudo se come recogiendo el caramelo cremoso con una cuchara pequeña o con el dedo.
Mazapán: Elaborado principalmente con maní molido u otros frutos secos y azúcar. La mezcla se compacta hasta obtener una forma redonda y sólida. Tiene una textura quebradiza y ligeramente granulada y un sabor dulce a nuez. El verdadero desafío es intentar abrirlo sin romperlo.
Crayón: Este dulce recibe su nombre por su apariencia, parecida a un crayón. Estos caramelos dulces, suaves y afrutados vienen en diferentes sabores como uva, mango y fresa.
Borrachines: Su nombre hace referencia a las formas divertidas y ligeramente impredecibles de las gomitas. Tienen una textura suave y cremosa que viene en sabores mixtos como ron, rompope, tequila, capuchino, whisky y chocolate.
En polvo
Los dulces mexicanos en polvo generalmente se elaboran con una combinación de azúcar, sal, sabores de frutas y, a menudo, chile en polvo para crear una mezcla única. Los dulces mexicanos en polvo a menudo se disfrutan lamiendo la mano o espolvoreando el polvo directamente sobre la lengua.
Limón 7: Agrio y salado, este es un polvo de color verde pálido que hará que tu cara se arrugue.
Miguelito: Generalmente utilizado como aderezo o salsa, Miguelito es un polvo dulce y picante.
Lucas: Este polvo viene en tres sabores: mango, sandía y chamoy. Su perfil de sabor es más agridulce que picante, y los niños generalmente simplemente vierten el polvo en la palma de su mano y lo lamen.
Paletas
Sí, hay paletas picantes. Pero México tiene muchos sabores para ofrecer en cuestión de paletas, ofreciendo una explosión de dulzura afrutada y una textura suave. Suelen tener colores brillantes y algunos pueden incluir elementos adicionales, como centros rellenos de chicle, lo que proporciona un regalo divertido y placentero tanto para niños como para adultos.
Estas paleta sin chile ofrecen una deliciosa alternativa a los dulces más intensos y picantes que prevalecen entre los dulces mexicanos.
Paletón de Cajeta: Éste consiste en una paleta de forma ovalada que está hecha de cajeta. El caramelo tiene un sabor a caramelo cremoso y dulce, a menudo con un toque de vainilla.
Vero Manitas: Son paleta con forma de manitas, y viene en sabor dúo: fresa y cereza.
Jumbo Cereza: Paletas de gran tamaño con sabor a cereza. A menudo presentan un color rojo brillante y un sabor dulce a cereza con chicle en el centro.
Cachetadas: Un tipo de dulce mexicano que tiene forma de disco plano y delgado, que algunos usan literalmente para abofetear a otros —he de ahí su nombre. Estos dulces son similares a los rollitos de frutas.