La decoración interior con elementos naturales ha aumentado en años recientes, gracias al amor a las plantas y la necesidad de relajación. Una de las tendencias que ha ganado fuerza es la creación de jardines zen, también llamados jardines japoneses o Karesansui. Estos jardines minimalistas se pueden crear con arena, grava y piedras, pero la realidad es que el concepto es un poco más complejo, ya que tienes que decidir la ubicación, el tamaño y hasta el tipo de plantas. Pero no te preocupes porque tenemos todos los conejos para que puedas construir un hermoso y relajante jardín zen en tu hogar sin importar el tamaño de tu casa.
Por qué tener un jardín zen en tu hogar
La función principal de los jardines zen japoneses es relajar la mente y el espíritu de cualquier persona que lo mire, ya que está decorado con diversos tipos de elementos que crean una composición única y relajante. El significado simbólico de la grava o arena que destaca en estos jardines es el del mar, mientras que las piedras y plantas que se ubican en su superficie representan a la tierra. Es una tradición dibujar formas con rastrillos en la arena alrededor de las piedras de manera ondulada, ya que es una actividad totalmente relajante que ayuda a vaciar la mente.
Crea tu propio jardín zen
La creación de tu propio jardín zen o Karesansui es más fácil de lo que imaginas y puedes adaptarlo a cualquier espacio desde una pequeña caja para decorar una habitación, hasta un enorme patio dedicado a la relajación. Te decimos qué pasos necesitarás seguir para crear tu jardín zen.
Determina la ubicación
Los jardines zen pueden instalarse tanto en el interior como en el exterior, y es importante decidir esta ubicación ya que de esto dependerá el tamaño del jardín, la distribución de los elementos y hasta los materiales que necesitarás.
Establecer el tamaño
Para comenzar con tu jardín zen, necesitas decidir el tamaño ideal para poder diagramar la distribución de los elementos principales como las piedras, las plantas y hasta los patrones creados en la arena. Pero no te preocupes si sientes que no tienes el espacio suficiente, ya que sin importar el tamaño, puedes crear un hermoso Karesansui en tu hogar.
Elige el material adecuado
Dependiendo de la ubicación que elegiste para tu jardín zen serán los materiales que necesitarás. El elemento principal del Karesansui es la grava o arena que formará relajantes patrones en el suelo, pero dependiendo el clima, la ubicación y tus gustos, tendrás que elegir entre grava y arena. Aparte podras jugar con tipos de piedras y plantas que se adapten a la luz de esa ubicación.
Coloca la malla antimaleza
Uno de los factores distintivos de este minimalista jardín es su limpieza y facilidad de cuidado, por eso este paso es tan importante, ya que colocar una malla en el suelo podrás evitar que crezcan las malezas y se contamine el espacio.
Prepara el molde donde irá la grava o arena
Tendrás que crear un molde para contener la arena o la grava. Si elegiste crear tu jardín zen en un patio completo, puedes dividirlo en áreas y crear límites con madera o piedras. Sin embargo; si decidiste crear un jardín zen en miniatura podrás crear un molde con una caja o molde.
Coloca la grava o arena
Este paso es el más sencillo, una vez que tu malla antimaleza esté instalada y tu molde esté dividido, llena el espacio completamente de grava y arena. Puedes mezclar ambos elementos y dividirlos con piedras.
Agregar piedras, troncos o plantas
Puedes personalizar tu jardín zen de la forma que quieras. Las piedras, plantas y troncos son los elementos más comunes que se utilizan para decorar estos espacios. Puedes experimentar creando jardineras completas dentro de tu Karesansui o crear corredores con piedras.
Crea formas con un rastrillo
Uno de los grandes beneficios de los jardines zen es la capacidad de poder desestresara los propietarios al jugar con el rastrillo creando formas en la grava o el arena. Por eso agarra tu rastrillo y relájate creando formas y patrones.