Salvador Díaz Mirón Selección y nota de Héctor Valdés VERSIÓN PDF
|
Nota introductoria
El 14 de diciembre de 1853 nació Salvador Díaz Mirón en el Puerto de Veracruz y el 12 de junio de 1928 murió en la misma ciudad. Estudió en el seminario, como muchos jóvenes del siglo pasado; pero su formación fue liberal. Siendo niño, en su casa recibió su primera educación; su padre fue también poeta y luchó con las armas al lado de los liberales. Por razones políticas, ambos se exilian en Nueva York; de aquel entonces data el primer poema conocido de Díaz Mirón: “Mística”, 1867. La biografía del escritor más parece la de un personaje de novela de aventuras que la de un periodista y poeta; un temperamento explosivo lo lleva a enfrentarse a tiros con sus contrincantes políticos, y a la prisión en distintas ocasiones. Pero tal vez el hecho más triste de su vida fueron los cuatro años que pasó en la cárcel de Veracruz a partir de 1892, por haber matado, aunque en defensa propia, a Federio Wólter, de Tlacotalpan. Al volver a la vida activa, Díaz Mirón ya no es el mismo de antes. El paladín de las causas populares, el defensor de los menesterosos a quien la justicia social debe versos tan conocidos como: Sabedlo, soberanos y vasallos, / proceres y mendigos: / nadie tendrá derecho a lo superfino / mientras alguien carezca de lo estricto; el émulo de Víctor Hugo y de Lord Byron, de quienes aprendió el cultivo de los temas soberbios y altivos y la rebeldía, sale de la prisión a una existencia menos riesgosa, más conciliadora, al menos en apariencia.
Héctor Valdés |
Sursum A Justo Sierra ¡Cuán grata es la ilusión a cuyos lampos |
A Gloria
No intentes convencerme de torpeza |
Toque
¿Dó está la enredadera que no tiende
|
Cleopatra
La vi tendida de espaldas
|
La nube
¿Qué te acongoja mientras que sube |
La conmemoración [Espectros épicos]
¿A dónde con los griegos melenudos |
Al chorro del estanque... [Melancolías y cóleras]
Al chorro del estanque abrí la llave, |
Música de Schubert
Crin que al aire te vuela, rizada y bruna, |
El fantasma
Blancas y finas, y en el manto apenas
Cárcel de Veracruz, el 14 de diciembre de 1893
|
Nox
No hay almíbar ni aroma |
Idilio
A tres leguas de un puerto bullente * Y a la puerta del viejo bohío * Vestida con sucios jirones de paño,
|
A ella
Semejas esculpida en el más fino |
Gris de perla
Siempre aguijo el ingenio en la lírica y él en vano |
Beatus ille...
¡Oh paz agreste, cuánto
|
Paisaje …et la lune apparut sanglante, Viejas encinas clavan |
Dentro de una esmeralda
Junto al plátano sueltas, en congoja
|
A un profeta
¡Santa la poesía |
Los peregrinos
Ambos justos recorren la campiña serena |